1º Porque la Corte Penal Internacional de La Haya al admitir la demanda boliviana y rechazar la objeción preliminar de incompetencia presentada por Chile, no reconoce ni explícita ni implícitamente que Chile deba darnos una
salida soberana al mar, sólo admite la demanda boliviana sin llegar al fondo del asunto.2º Porque la Corte a lo sumo puede obligar a Chile a sentarse en la mesa de negociación, pero JAMÁS a ceder territorio con soberanía. Porque no es de su competencia y no tiene la fuerza coercitiva para lograrlo. De hecho, parte del fallo de los jueces indica que a la Corte “no le corresponde predeterminar” el resultado de una eventual negociación entre Chile y Bolivia por una salida
soberana al Océano Pacífico. Más claro, agua.
3º Porque Chile repetidas veces ha manifestado que para ceder territorio con soberanía a Bolivia deben cumplirse dos requisitos: que todo Chile apruebe dicha medida mediante plebiscito y que la cesión de territorio sea en base a un canje territorial, en igual extensión y recursos estratégicos. Cosa verdaderamente imposible, porque el 86% de los chilenos se resiste a esta medida y porque nosotros no podemos seguir desmembrando nuestra Patria.
4º Porque cualquier acuerdo con Chile sobre territorios que pertenecieron al Perú (v. gr.: sobre la línea de la Concordia), debe necesariamente involucrar a este último por el tratado “candado” de 1929. Por lo tanto, el tema deja de ser bilateral para convertirse en trilateral. Y como decían nuestros abuelos, vuelve la burra al trigo (el mismo acuerdo denominado de “Charaña” se vio frustrado por este aspecto).
Desde nuestro punto de vista, la solución no pasa por crear mayor animadversión
en la otra parte que debe estar dispuesta a solucionar nuestro enclaustramiento. Pasa por integrarnos, por buscar un enclave para Bolivia en un puerto de aguas profundas a cambio de energía para Chile, que es su talón de Aquiles. Pasa por interesar a Brasil en un tren bioceánico que partiendo de Sao Paolo, atravesando nuestro territorio, termine llegando a nuestro enclave
donde China( * ) también tiene sus intereses). No sólo se trata de sentarse a negociar,
sino de que el negocio sea atractivo para ambos y para la región.
No podemos permitir que se nos engañe o que se juegue con nuestro fervor
patriótico con tan soberana impostura, que lo único que pretende es inflar
electoralmente al señor Evo Morales.
No creo que haya boliviano que no ame a Bolivia y que no aspire a llegar
nuevamente a las costas del Pacífico. Pero esa aspiración, ese sentimiento
irrenunciable que nos llega hasta los tuétanos y que enciende nuestras más
altas pasiones, no puede ni debe ser objeto de manipulación.
Disculpas por la honestidad.
Extraído de: https://www.facebook.com/HoracioPoppeDiputado
* Debería decir CHILE